sábado, 13 de junio de 2009

Boletín Especial: La Espada de Simón Bolívar y la Patria (XXVI)


Simón Bolívar es, sin lugar a duda, el único héroe histórico de la gran región septentrional de América del Sur. Su genial labor, militar y legislativa, su integridad personal y honorabilidad así como su dramática visión de una Gran Colombia (que momentáneamente logró hacer realidad) lo ubican a la par de los más renombrados próceres del continente Americano (pulse sobre la imàgen para ampliarla).

Porque la Gran Colombia, por efímera que su existencia haya sido, fue un logro político, institucional y territorial, de colosales proporciones. En esa breve encrucijada histórica, Simón Bolívar nos ofrecía la oportunidad de un futuro glorioso (Pulsar).

Simón Bolívar y todo lo que de alguna manera lo representa (estructuras históricas, objetos, escritos) está muy por encima de cualquier ideología local o global, llámese esta puntofijismo, chavismo, capitalismo o socialismo, o cualquier otra que haya surgido o surja en el futuro.

De existir en este momento, cuatro millones de venezolanos dispuestos u obligados a aplaudir el uso de su nombre y emblemas para los fines propagandísticos de un determinado culto personal, habría que reconocer también que hay otros cuatro millones para quienes esta manipulación resulta odiosa y repulsiva. Además hay que contar a millones y millones de latinoamericanos que ven con malestar e indignación este inaudito atropello histórico.

Es importante entender que Simón Bolívar nos representa a todos pero a ninguno en particular. Su prestigio y probidad no están disponibles a ninguna forma de uso personal. Simón Bolívar es uno de esos grandes faros históricos cuyo destino ha sido y es guiar el curso de la humanidad.

Que la humanidad escuche es otra cosa.

Nosotros, perenne barco a la deriva, nunca hemos estado en esa sintonía.

1 comentario:

mkshistory dijo...

I read your blog this afternoon and just thinking about what Simon Bolivar had in mind, is mind boggling and what a shame that he didn't succeed.

Just keep writing. It is a kind of endless subject in a way.